lunes, 17 de diciembre de 2012

El último viaje de Oscar Niemeyer a Brasilia.



EL ÚLTIMO VIAJE DE OSCAR NIEMEYER A BRASILIA.


Para mí la arquitectura no es lo más importante. Importantes son la familia, los amigos y este mundo injusto que debemos modificar”
Minha Arquitectura”, Oscar Niemeyer.

Croquis Memorial América Latina (SaoPaulo)                                   Oscar Niemeyer architizer.com


Oscar Niemeyer era brasileño y arquitecto y su obra expresa toda la exuberancia vital de su país y una personalísima versión del Movimiento Moderno que, en sus manos, dejó de ser el “estilo internacional” para ser un “estilo cosmopolita”, abriendo la vía a la fusión con elementos autóctonos de los diferentes lugares. Como expresa la cita inicial, su compromiso con la sociedad de su tiempo ha sido nítido e inequívoco, como asumía el Movimiento Moderno, pero ha sido un caso singular por su capacidad para disfrutar y crear vida, ofreciendo su arquitectura al disfrute de las personas, que eran quienes le importaban verdaderamente; ello le ha supuesto su reconocimiento universal más allá de ideologías. Naturalmente, también encontró oposición en sectores más ortodoxos del M. M., como Max Bill o Walter Gropius, críticos ante el exceso, la sensualidad y la singularidad brasileña, pero su sombra se alarga hasta el “formalismo aleatorio” del último “star system” de la Arquitectura, Zaha Hadid, Peter Eisenman, Toyo Ito… incluso Santiago Calatrava, aunque todas las comparaciones son odiosas y, a veces muy odiosas, estimo más espontánea, funcional y poética la obra de Niemeyer.


 Palacio Capanema. monografias.com                              Planta Baja   Palacio Capanema eausat.blogspot.com

INICIOS   

Oscar Niemeyer nació en Río de Janeiro, disfrutó del ambiente bohemio de su ciudad, en el que se movía gente como un estudiante de Derecho que nunca ejerció, Ary Barroso, otro mito popular brasileño, compositor de “Aquarela do Brasil” y “Bahía”. Tras casarse muy joven inició sus estudios de arquitectura que acabó con 27 años, entrando a trabajar en el estudio de Lucio Costa. La influencia de Costa es clave para la cultura brasileña, porque supo valorar el patrimonio cultural de su país, buscar magníficos colaboradores, para compartir el trabajo, y también entender el potencial del MM (Movimiento Moderno); su personalidad humanista le permitió compatibilizarlos y abrir una vía brasileña propia, que Niemeyer supo expresar mejor que nadie. En 1936, Le Corbusier visitó Rio, invitado por Lucio Costa, para proyectar el Ministerio de Educación y Salud, conocido como el Palacio Capanema. Para Niemeyer supuso un gran impacto el pensamiento de LC, como apóstol de la nueva arquitectura, y formó parte del equipo de excelentes profesionales colaboradores, dirigidos por el mismo Lucio Costa, como A. Ridey, J.Moreira, C. Leao, E. Vasconcelos y Burle Marx, que acabaron proyectando el edificio. Su papel fue destacado pues influyó en algunas decisiones determinantes, como la altura de los pilares de la planta baja semiabierta.


    A Obra de Berco papressblog.com                                   Pabellón Brasil 1939 New Yorkskyscrapercity.com



En 1937 realizó su primer proyecto para una institución filantrópica, la “Obra do Berco”, y es un edificio de gran interés por el dominio en el manejo de la estética del MM, con la utilización de todo el repertorio, separación de fachada y estructura, pilotis exentos, planta baja libre y con jardín, “brise- soleils”, terrazas ajardinadas, etc. En la misma línea se mueve el Pabellón de Brasil en la Exposición de New York, en colaboración con Lucio Costa, que siempre tuvo clara su valía y le invitó a compartirlo.


Croquis conjunto Pampulha.plataformaarquitectura.cl       Iglesia San Francisco de Asís plataformaarquitectura.cl                                                                                            
                                                                                  
PAMPULHA.

En 1940, Juscelino Kubitschek fue elegido alcalde de Belo Horizonte y recurrió a Oscar Niemeyer para proyectar el conjunto de Pampulha, junto a un lago artificial que abastecía de agua a la ciudad. Se trataba de un variado grupo de edificios que incluían la Iglesia de San Francisco de Asís, la Casa do Baile y el Casino. El resultado fue espectacular, la plástica del Movimiento Moderno y de Le Corbusier era reinterpretada con un lenguaje fresco y poético en el que “La forma sigue a la belleza, no la forma sigue a la función”, según frase del propio Niemeyer. Estamos ante el primer encargo importante para Niemeyer y, tras haber demostrado su dominio del lenguaje del MM, en él ya manifiesta nitidamente su idea de la arquitectura y así lo reconoce él mismo. En apenas tres años, había pasado de dominar el "estilo internacional" del MM a desarrollar un lenguaje propio y completamente maduro.



    Iglesia San Francisco de Asis. blog,deviajeabrasil.com                          Frente Iglesia San Francisco de Asís.                                            


La poética de la curva envuelve las formas de hormigón, con una sensualidad hasta entonces desconocida, las onduladas cubiertas de la Iglesia, su “frágil” campanario conectado por una marquesina de acceso a la nave, en su interior se produce la fusión de la envolvente que se confunde con techo y pared, de modo que surge una nueva verticalidad, con una expresión de ondulaciones externas inconfundibles, que hacen de esta iglesia un auténtico manifiesto y la principal obra del complejo, una singular mezcla entre el espíritu funcional del MM y el barroco. La sinuosidad de las pérgolas hacia la Casa do Baile, con una planta de doble envolvente circular, que matiza la fachada abierta de vidrio y la aislada de hormigón y cerámica. El Casino es el más complejo y de aspecto más regular, pero el edificio “flota” sobre la planta semisótano, entrada en el terreno de la leve loma desde la que se domina el lago, y mantiene el mismo diálogo entre el hormigón de la estructura y la ligereza del vidrio, pero el organicismo curvo surge desde la pérgola de acogida hasta el pliegue ondulado de las fachadas de vidrio.




Casa  do Baile  screamyell.com.br                                                     Pérgolas Casa do Baile.ipernity.com                                                                                                                                        

En el conjunto continúa el estilo de trabajo, que ya sería habitual, de colaboración con magníficos artistas casi habituales, Burle Marx (jardinería y paisajismo), Cándido Portinari (pintura y cerámica), Joaquim Cardozo (estructuras), etc. Pienso que la fluidez  de Pampulha abre el discurso de Niemeyer en todo su esplendor, lo demás es la evolución hacia desarrollos formales de mayor escala, hasta la “ciudad- escultura” que es Brasilia. La personalidad de Niemeyer logró algo insospechado: bajo la influencia de Lucio Costa, convertió su personal visión de la arquitectura moderna, adaptada a su país, en una señal de identidad de Brasil, cuya estela acoge nombres de otros arquitectos excelentes. La vitalidad brasileña multicultural favorece la creatividad artística, que se aprecia en la música o la arquitectura, aunque siempre contando con el inconveniente de no desarrollarse en el contexto de una cultura sajona dominante. 

Casino Pampulha, acceso. vitruvius.es                                     Casino Pampulha. dessignkulyur.wordpress.com


INTERMEDIO.

Pampulha le supuso un reconocimiento que le llevó a realizar muchos e importantes proyectos. Se vió claro el poder de su discurso a la hora de afrontar proyectos, tanto pequeños, su magnífica residencia, la Casa das Canoas, es una visión alternativa de arquitectura y naturaleza a la Casa de la Cascada de F.Ll. Wright, en 1953, como grandes, caso del parque de Ibirapuera (1953 en colaboración con Burle Marx), o el enorme edificio residencial COPAN (1957- 1966), ambos en Sao Paulo.



 Casa das Canoas. koolkase.blogspot.com          Casa das Canoas. Interior. gonzalezpedemonte3.blogspot.com


Anteriormente se reencontró con su viejo maestro Le Corbusier en el concurso para el edificio de la ONU en New York. No fue un reencuentro amable, pues la egolatría de LC no aceptaba la idea de ser superado por su antiguo “aprendiz”. Se dieron decenas de propuestas para buscar una síntesis, que al final se logró la síntesis entre las propuestas 23 de LC y 32 de Niemeyer, que aceptó el ascendente que le correspondía al “maestro”, sin entrar en mayores polémicas. Finalmente se incorporó un tercer arquitecto norteamericano, William K. Harrison, para desarrollar el proyecto y las obras. 



Parque Ibitapuera (Sao Paulo). urbanity.es                                     Edificio COPAN (Sao Paulo).cntraveler.com                                                                              



BRASILIA.

Cuando Juscelino Kubitschek llegó a la presidencia de Brasil (1955) con el propósito de “hacer en cinco años lo que se hacía en cincuenta”, tenía el proyecto de construir una nueva capital cuya ubicación permitiera una mayor cohesión del territorio nacional, una idea latente desde finales del siglo XIX. Él tenía muy claro a quién recurrir: Lucio Costa como urbanista y Oscar Niemeyer como arquitecto diseñador.





Ambos arquitectos asumieron el reto y tras tres años de trabajo febril (1957- 1960) se construyó Brasilia. Una ciudad nacida para ser imagen (la alborada) del Nuevo Brasil, pero que ha trascendido de modo que lo es para el mundo, en general. El esfuerzo fue enorme, entonces Niemeyer tenía fobia al avión y recorría en coche los casi 1200 kms, entre Rio y Brasilia, casi todas las semanas, pero la alegría de crear abarcaba la peripecia vital. Debían resultar unos viajes increibles según lo cuenta en su autobiografía, “As Curvas Do Tempo”, algo dispersos por eventuales “brincadeiras” surgidas por el camino; Niemeyer vivía la Arquitectura, pero también la vida.




Tribuna Supremo.flickhivemind.net                                  Fernado Bicerra Jr..- EPA

Niemeyer y Lucio Costa.sambadrome.com


El resultado final se calificó como ciudad “futurista”, pero ese concepto puede asociarse a valoraciones más o menos oportunistas, actualmente la idea del futuro ofrece otras iconografías. En realidad se trata de una arquitectura “atemporal” que nace clásica, un complejo similar al de culturas egipcias, babilónica o romana, nacida monumental en tan reducido tiempo de ejecución y por ello es “Ciudad Patrimonio de la Humanidad”, declarada por la ONU. Sobre Brasilia se han dado muchas opiniones muy variadas, pero todas coinciden en que es impresionante. El trazado de “Y” de Lucio Costa, semejando un avión o un pájaro, es la máxima expresión de la ciudad funcional, el predominio de los ejes de tráfico y la idea de monumentalidad, zonificaciones estrictamente definidas y jerarquizadas, con piezas repetidas de bloques ministeriales y supermanzanas residenciales, de plantas bajas permeables hacia amplios jardines interiores. Entre toda la ordenación surgen, de la mano de Niemeyer, la legión de edificios públicos singulares: la plaza de los tres poderes con el Parlamento, el Palacio Presidencial (Palacio Planalto), el Tribunal Federal Supremo, el Ministerio de Asuntos Exteriores (Palacio de Itamaraty), el Palacio de la Alborada (residencia presidencial), la Catedral, el Memorial Juscelino Kubitschek.



    Plaza de los Tres Poderes (Brasilia). panoramio.com                              Catedral de Brasilia. panoramio.com


Cuando se está en el lugar, se tiene una sensación casi onírica, próxima a un cuadro metafísico de Giorgio De Chirico, porque la experiencia es singular. La escala arquitectónica entre grandes espacios abiertos, la presencia de amplias láminas de agua con jardines flotantes en ocasiones, que además del efecto estético y climático, producen estatismo e inmaterialidad, reforzada por la “levitación” que aportan los altos pilares apuntados. Ante la magnitud del espacio, la percepción de la escala humana se altera, con el referente de potentes esculturas ubicadas en puntos estratégicos para referenciar edificios. Así sucede con “Os Candangos” de Bruno Giorgi en la Plaza de los Tres Poderes, una explanada de gigantes, en la que ellos aportan la escala; algo similar ocurre con “As Laras” o “A Justica” de Alfredo Cheschiatti, en el estanque del Palacio de la Alborada y el Tribunal Supremo, etc. Todo ello con el referente básico del edificio del Parlamento, con sus casquetes esféricos de tratamiento inverso, reposando sobre una plataforma de la que emerge el bloque central bífido y separador: una imagen rotunda e inolvidable.

    Ministerio de Justicia. panoramio.com                                            Palacio de Planalto.lanacion.com.ar

Los interiores siguen el mismo discurso de amplitud, fluidez y singularidad espacial, con escaleras vertiginosas para disfrutar la percepción del espacio, la penetración del paisaje y la presencia de la luz natural, que inunda dependencias alejadas de la farragosidad de la burocracia oficial. El lenguaje se vuelve más limpio, concretado por pocos materiales (vidrio, madera, hormigón) una expresión minimalista, donde el secreto es el volumen, definido por la estructura, y en la que los elementos ornamentales son referentes puntuales en la amplitud espacial, donde se potencian interaccionando espacio y objetos, algunos de los muebles pueden ser diseños del propio Niemeyer. Mies Van Der Rohe aplicaba su minimalismo en espacios contenidos, incluso proyectándolo hacia el exterior, como en el pabellón de Barcelona; Niemeyer hace lo mismo, pero en espacios más exuberantes.


   Palacio de Itamaraty (Ministerio de Asuntos Exteriores). 123rf.com         Itamaraty. Interior. minoa.eu.com


En Brasilia el orden parece imponerse a la persona bajo esa amplitud de espacios, las formas sofisticadas y amables, incluso en las magníficas manzanas estrictamente residenciales, pero la realidad es que de sus 2.500.000 habitantes, menos del 20% vive en la ordenación urbana inicial y el resto lo hacen en desarrollos periféricos y, además existe un área metropolitana de 3.700.000 habitantes. Lógicamente se producen los inevitables atascos de tráfico en horas punta, aunque la traza urbana está planteada para los automóviles y la distancia entre edificios favorece la inseguridad. Hace diez años pude ver como en las zonas residenciales del trazado original, se abría paso cierta multifuncionalidad. No es fácil vivir en Brasilia, porque no es fácil hacerlo en un manifiesto, pero en el visitante queda el recuerdo imborrable de su escala urbana y la configuración de su arquitectura. 



   Palacio da Alvorada. cerohora.clicrbs.com.br                                maisfundinho.com.br
                                                                                                

EXILIO.

La presidencia de Kubitschek, abrió un período de expansión y optimismo en Brasil y de ello se benefició la cultura, que empezó a ser una referencia internacional, literatura, cine, arquitectura y sobre todo música: la samba abría paso a la bosanova y, al inicio de los “60”, surgieron los nombres de Tom Jobim, Vinicius de Moraes, Joao Gilberto, Badem Powell, entre otros muchos de una lista interminable, que continúa creciendo … Desde el barrio de Ipanema se cantaba para todo el mundo y Niemeyer compartía amistad y proyección exterior con otros muchos artistas brasileños. Tras la retirada de Kubistchek (1960), que dejó al país con un crecimiento industrial del 80% y una inflación del 43%, se mantuvo la inercia temporalmente, pero surgieron tensiones  políticas. Su sucesor Janio Quadros accedió al poder invocando la lucha contra la corrupción, al poco tiempo dimitió a favor de su vicepresidente, Joao Goulart, todo ello en medio de la presión militar frente a una posible deriva izquierdista. En 1965 los militares tomaron el poder y Niemeyer el camino del exilio.


    Sede P.C. entretenimiento,uol.com.br                                     Editorial Mondadori. euronews.com


París fue su siguiente ciudad y contó con el apoyo del partido Comunista francés, que le abrió la puerta a diferentes trabajos, entre ellos su sede en París. Además realizó importantes proyectos para Argelia, Líbano o la editorial Mondadori en Italia (una variación sobre el Palacio de Itamaraty). No debió ser fácil para el espíritu de Niemeyer vivir fuera de Brasil, aunque lo visitara cada vez con más frecuencia, antes de su regreso definitivo en 1985, con la finalización de los gobiernos militares. Era desde su inicio el Director de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Brasilia y, aunque dimitió con el Gobierno militar, lo fue retomando antes de su retorno definitivo.  

    escaleras. architizer.com                                           Universidad de Constantina. lostonsite.wordpress.com




RECONOCIMIENTO. 

Nuevamente establecido en Brasil, recibió el merecido reconocimiento nacional y exterior, que se concretó con la consecución del Premio Pritzker en 1988, aunque compartido con Gordon Bunshaft; ciertamente su declarada militancia comunista y sus “amistades peligrosas” (la antigua URRSS, Fidel Castro, Chávez, etc) no le facilitan su valoración en ciertos ambientes, pero la logró en otros, como prueba su exilio. El espíritu creativo de Niemeyer nunca podía estar parado, así que podíamos iniciar en este punto una nueva fase en su obra: los “proyectos tardíos” basados en un “maximalismo expresionista”, donde la singularidad de sus edificios se refuerza por la contundencia icónica de una idea arquitectónica, de forma simple y escultórica, de potente escala, dominada por el color blanco con referencias puntuales de colores primarios y el equilibrio entre elementos yuxtapuestos.



 Museo Arte Contemporáneo. Niteroi. archidialog.com         Museo Arte Contemporáneo. Niteroi. economist.com


Algunos críticos arquitectónicos han manifestado sus reservas respecto a este tipo de proyectos, que juzgan inferiores a su legado anterior; personalmente me parece que es una alternativa dentro del mismo discurso, los croquis siguen manteniendo la misma fluidez, como los interiores, pero la selección de elementos es más escueta y lo que busca es la rotundidad formal, dentro de paisajes abiertos muy concretos, lejos de la sutileza de Pampulha o la Casa das Canoas. En realidad la evolución se inició en los años “50”, cuando anunció en un texto el “depoimento” de su arquitectura, en la que buscaría la simplicidad máxima, eliminando referencias ornamentales tópicas (pilotis, “brise- soleils”, marquesinas) de modo que su arquitectura buscaría la pura expresión estructural, como configuración de volúmenes, con el objetivo de generar belleza, empeño máximo y justificable en sí mismo. Incluso su elegante complejo de la Administración del Estado de Minas Gerais, con un programa más convencional, asume esa rotundidad formal, con dos poderosos bloques curvos que cobijan en su espacio libre central una pieza de salón, con planta baja diáfana en un entorno ajardinado. A lo largo de los años ha sido evidente este lejano compromiso simplificador, incluso el hormigón se ha vuelto blanco, algo que no satisface a algunas “ortodoxias”, pero tampoco es novedad.


Cewntro Cultural Oscar Niemeyer (Avilés).
marcokenobi.wordpress.com
cajalesygalileos.wordpress.com        diletanteylasmusas.blogspot.com
ocholeguas.com

El Museo de Arte Moderno de Caracas (1955 podría ser el antecedente en este tipo de objetos arquitectónicos de gran escala, iniciado con el Museo de Arte Contemporáneo de Niterói (1996) y continuado, como obras más representativas, con el Museo Oscar Niemeyer en Curitiba (2003) y el Centro Cultural Niemeyer en Avilés (2011). En los casos referidos, los accesos a los “edificios- escultura” se desarrollan mediante rampas espectaculares, que envuelven al edificio y facilitan su previo reconocimiento visual, mediante ese recorrido casi iniciático. La sinuosidad de las pérgolas de Pampulha se ha transmitido a las rampas. Niemeyer siempre fue ejemplo de generosidad y puede testimoniarlo la Fundación Príncipe de Asturias, con el regalo del Centro Cultural de Avilés. Es la voluntad de trabajar en equipo, expresada en una Arquitectura generosa y sinérgica, en sí minimalista mucho antes de que fuera una moda, pero en compañía de otras manifestaciones artísticas: Pintura, Escultura, Paisajismo, Jardinería, en la que los colaboradores aportan su riqueza expresiva. 

Administración Estado Minas Gerais. elpais.com                                               Museo Curitiba it.wikipedia.org

Setenta y siete años de ejercicio profesional facilitan una obra amplia, si añadimos que Oscar Niemeyer era especialmente prolífico, la cantidad de obras que deja como legado es impresionante. La Red esta llena de imágenes espectaculares de su obra y las que ilustran este texto, a cuyos autores deseo expresar mi agradecimiento, sólo contemplan una pequeña parte, las más conocidas y como referencias muy puntuales. Merece la pena "navegar" para disfrutar de una personal explosión de la imaginación arquitectónica de Oscar Niemeyer.

 
Niemeyer con Vinicius de Morais y Tom Jobim. plataformaarquitectura.cl
  Cúpula Espada de Caxias (Brasilia). architectmagazine.com



EL SUEÑO ETERNO.  

Hay que soñar, de lo contrario no suceden las cosas”. Oscar Niemeyer fue un soñador que supo construir sus sueños como arquitecto y darles un marchamo de eternidad, a través de la belleza, y responde a la calificación de la novela de Raymond Chandler, aunque sin ninguna relación con ella. No pudo arreglar que el mundo fuera más justo, aunque siempre estuvo comprometido en esa lucha, pero consiguió acercar la belleza, inspirada en las curvas de los montes, los ríos y las mujeres de su país que amaba. Consiguió vivir y disfrutar largamente de su familia, sus amigos y de la vida en general, cuyos placeres de todo tipo supo apreciar. La Fundación Telefónica en Madrid realizó una excelente exposición sobre su obra y su vida en 2009, en ella se apreciaba la vitalidad de un centenario con gran sentido del humor, una memoria admirable y una creatividad perpetua. 



    Mecedora- chaise longue. stylecrave.com                      Homenaje Palacio Planalto. Ueslei Marcelino- reuters


Apasionado por el fútbol, la samba, la lectura y siempre curioso, su dilatada y afortunada aventura personal puede dar una sana envidia, pero él trataba bien a la vida y merecía que la vida lo tratara bien. Como parece natural, tenía que ser el autor del marco para el desfile del Carnaval de Río, el Sambódromo, y preparaba el Estadio para el próximo Campeonato Mundial de Fútbol. El 5 de diciembre, a falta de diez días para cumplir 105 años finalizó su extraordinaria trayectoria; el día 6 de diciembre de 2012, Oscar Niemeyer hizo su último viaje a Brasilia, donde recibió el homenaje de su pueblo, para retornar a Rio de Janeiro como carioca de corazón, principio y fin de su definitivo viaje.



                                Oscar Niemeyer. diseño-elementos-blog.com


Por suerte, nos queda el legado de su obra, que  continuará derrochando  emoción y vida, para mantener el sueño eterno de un mundo mejor posible.







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